¿Qué zonas se pueden tratar con ácido hialurónico?
Afortunadamente el ácido hialurónico puede ser aplicado prácticamente en cualquier zona de la piel que requiera mejorar la hidratación, los signos de envejecimiento o conseguir mayor volumen.
El uso más habitual donde se suele inyectar el ácido hialurónico es las áreas faciales como los labios, para su perfilado, hidratación y aumento de volumen, en la nariz (rinomodelación) para remodelar imperfecciones, y en los pómulos para realzar su volumen y remodelarlos. También se realizan infiltraciones de ácido hialurónico para restaurar el óvalo facial, como relleno de surcos nasogenianos y de arrugas, y como tratamiento periocular en las ojeras para recuperar el volumen perdido en la zona.
Además, el ácido hialurónico se utiliza para tratar el famoso código de barras (las arruguitas de expresión verticales en la zona superior de los labios y debajo de la nariz a consecuencia de varios gestos que realizamos espontáneamente en nuestro día a día) y las líneas de marioneta (aparecen a partir del final del surco nasogeniano, a la altura de la comisura del labio).
El ácido hialurónico tambien se puede inyectar en combinación con otros tratamientos como los inductores de colágeno, Radiesse o Ellansé o hilos tensores.
Es muy común que se inyecte en la mesoterapia facial, ya que se inyectan pequeñas cantidades de otros principios activos en la piel del rostro para mejorar su apariencia.
El ácido hialurónico es un recurso perfecto para remodelar diferentes partes del cuerpo, entre ellas los glúteos. Para lograr este objetivo, se utiliza una técnica eficaz y sencilla que consiste en la introducción o inyección de ácido hialurónico reabsorbible a nivel subcutáneo, específico para aumento de volúmenes corporales. Con unas microcánulas y varios puntos de inserción que no requieren suturas, se pueden elevar, proyectar, redondear y dar volumen a los glúteos de manera segura y eficaz. Se suelen infiltrar entre 200 y 500 ml por nalga para tratar toda la superficie glútea, y luego se masajea y moldea manualmente para conseguir el efecto buscado.
Además de los glúteos, el ácido hialurónico también se puede inyectar en otras partes del cuerpo para mejorar su apariencia. En el caso del escote, por ejemplo, se utiliza para reducir la apariencia de las arrugas y la flacidez de la piel en esta zona tan visible. En las manos, el ácido hialurónico se utiliza para rellenar y suavizar la piel de las manos y reducir la apariencia de las venas prominentes. En el caso de las rodillas, el ácido hialurónico se utiliza para rellenar las arrugas y reducir la apariencia de la piel flácida en esta zona.